Estudio de McKinsey muestra los cambios en el consumo de moda después de la pandemia

04/05/2020

En abril, la publicación inglesa Business of Fashion, en asociación con la empresa de consultoría McKinsey & Company, lanzó una nueva versión de su estudio “State of Fashion“.  Actualizado para reflejar la nueva realidad del sector de la moda, el estudio presentó un panorama lleno de transformaciones, en el que el sector debe mirar más de cerca las soluciones digitales, repensar su relación con la sostenibilidad y tener resiliencia.

El documento (disponible en inglés aquí) destaca que la industria de la moda ya estaba cambiando antes de la pandemia y ahora debe fortalecer estos nuevos conceptos para reinventarse. Los datos muestran un período de recesión seguido de un escenario cambiante y un rediseño de toda la cadena de valor. El pronóstico es “una creciente antipatía hacia los modelos comerciales que producen residuos y altas expectativas de acciones sostenibles y con propósito”.

El estudio también muestra que el consumismo excesivo debería disminuir, ya que las personas son más inseguras. Con esto, elegirán mejor dónde y qué compran, priorizando características como la sostenibilidad. Según una encuesta, el 15% de los consumidores de EE.UU. y Europa quieren comprar ropa más sostenible desde el punto de vista ambiental y económico.

Liquidación general

A pesar de la caída inicial debido a la inseguridad ante el escenario, las compras en línea han impulsado varios mercados, incluyendo el de la moda. En Brasil, las compras de comercio electrónico crecieron el 36% en la primera mitad de abril, según Nuvemshop, plataforma que agrega sitios de compras en línea y cuenta con la participación de más de 30 mil marcas en América Latina.

Según Nuvemshop, el sector de la moda aumentó sus ventas en el 53%, impulsado por las promociones. El informe “State of Fashion” muestra que esa tendencia de liquidación debería permanecer durante el resto del año, haciendo que las empresas busquen otras formas de llegar a los consumidores.

“Para mejorar sus perspectivas a largo plazo, las marcas tendrán que adaptar las estrategias de descuento alineando las promociones a sus diversos canales y aplicando un calendario revisado de productos que refleje la ‘nueva normalidad de la moda’. Ellas también tendrán que reinfundir el valor para que valga la pena a los consumidores comprar a precio total”, explica el texto.

Caminos digitales

“Si hay un período para aumentar lo digital, ese período es ahora”, dice el documento, destacando la importancia de la presencia digital, mientras los medios físicos están cerrados. Las redes sociales, las transmisiones en vivo, entre otras soluciones son algunas de las soluciones que demuestran dar resultados en este período.

“Las videoconferencias entre la marca y el comprador y las transmisiones organizadas por personas influyentes tuvieron una buena acogida”, explica la encuesta, en la que se habló con empresas chinas que han adoptado las nuevas prácticas. Los datos indican streamings en Taobao, sitio de ventas en China, aumentaron el 700%.

Nuevos tiempos

Aunque los tiempos son difíciles, es evidente que la recuperación del sector de la moda está ligada a los cambios en el comportamiento de las empresas y su relación con los consumidores. “La agilidad y la adaptación serán esenciales en la crisis. Pero cuando empiezan a aparecer los primeros signos de normalidad, el consejo es que las empresas no deben ser complacientes. En su lugar, deberían duplicar las medidas de recuperación y resiliencia, ya que serán tiempos de transformación sin precedentes para la industria de la moda. Sólo entonces las empresas pueden empezar a descifrar su “nueva normalidad”, concluye el estudio.