Líquido
El valor diferencial de la marca Líquido siempre fue orientado a la producción de piezas confeccionadas con los mejores tejidos y con estampados exclusivos a un precio justo, además de ofrecer la mejor atención al cliente. La producción linear y constante hizo que la relación entre la empresa y sus proveedores se fuese estrechando, logrando así la exclusividad en la selección de las materias primas de calidad y en el poder de negociación.
Al ampliar las reventas y conquistar nuevos clientes, la empresa asimiló ideas provenientes de los propios consumidores. Se observó la necesidad de ampliar la línea de productos y por eso se desarrollaron las líneas infantil y casual. También hubo la necesidad de contratar profesionales especializados para esas líneas. Y de esta forma, la marca pudo mantener la calidad de sus piezas y acompañar las tendencias del mercado.
La Líquido fue creada y pensada como una tienda de mercado callejero, pero la marca ocupó un nuevo nivel y la inauguración de tiendas en shoppings centers, fue una conquista considerada exitosa.