Tranoï y Vendôme presentan colecciones brasileñas de invierno
Las francesas Tranoï y Vendôme, que cerraron la última edición el 4 de este mes, recibieron marcas brasileñas, como Alessa, Patricia Bonaldi/ Pat Bo, Vivaz, Mabel Magalhães y Anamaria Couture, participantes de Texbrasil (Programa de Exportación de la Industria de la Moda Brasileña), desarrollado por Abit en colaboración con Apex- Brasil (Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones).
Con una fuerte influencia comercial, Tranoï recibe marcas de vestimenta femenina y accesorios. Ahí, la marca Alessa presentó la colección «Celtic Boudoir», que reinterpreta un tiempo incierto y de transición. Las piezas son hechas con lana, cuero metalizado con papel aluminio y lentejuelas con hojas de plata. El estilo moulage crea una silueta con aire de misterio.
La Vendôme, que es especialista en accesorios y vestimentas de lujo, mostró los mejores looks de marcas brasileñas high end femeninas. Anamaria Couture presentó un «chic sin esfuerzo», con vestidos livianos y fluidos, y una paleta de colores elegantes. Para Catia Macedo, representante de la marca el apoyo de Texbrasil fue esencial para la presencia exitosa en el evento: «El incentivo del Programa es muy importante para todas las empresas participantes, ya que nos ayuda a buscar nuevos mercados y negocios».
Para el invierno 2013, Mabel Magalhães lanzó una colección con prendas de lujo hecho de encaje, vestidos bordados y en tul con colores fuertes explorando diferentes materiales influenciados por los estilos art decó, art noveau y el movimiento barroco. Pat Bo, de la diseñadora Patrícia Bonaldi, propone un retorno nostálgico al circo, usando tonos vibrantes como rosa, azul, dorado y rojo. La propuesta es mezclar telas, estampas, encajes, perlas y materiales esmaltados. Mientras tanto, su otra línea, que lleva su nombre, buscó inspiración en la cultura india, con telas en variadas texturas, formas y estampas, dando movimiento a las prendas. El objetivo es exaltar a la mujer moderna y contemporánea.
Con referencias llegadas de la Royal Road, Vivaz rescató en su origen los bordados barrocos, interpretando los vitrales de iglesias. El trabajo, hecho en mayor parte con cristales Swarovski, traduce el brillo de las piedras preciosas.